La banda gástrica sigue siendo a fecha de hoy una de las opciones por las que optan los pacientes que deciden realizarse una operación de obesidad.

No obstante, es importante saber que, aún siendo la banda gástrica un procedimiento simple, es totalmente ineficaz para tratar la obesidad mórbida.

Estudios realizados demuestran que a los 5 años de su colocación, menos de 23% de los pacientes operados de obesidad mantienen la pérdida de peso inicial.

Es decir, sólo uno de cada cuatro portadores de banda gástrica consigue su objetivo de pérdida de peso.

Por otra parte, la operación de banda gástrica no es un procedimiento adecuado para tratar la diabetes que acompaña a más de la mitad de los obesos mórbidos.

¿Qué hacer cuando la banda gástrica no funciona, da complicaciones o no se consigue su objetivo de pérdida de peso tras una operación de obesidad?

Nuestra propuesta, y hoy también la de la mayoría de los centros que realizan cirugía de la obesidad, es la conversión a by-pass gástrico por laparoscopia.

La conversión de la banda gástrica a by-pass gástrico realizada por laparoscopia es una cirugía que puede ser hasta cierto punto compleja. El nivel de complejidad dependerá de dos factores básicamente:

• del grado de fibrosis de la banda,
• de la experiencia del equipo quirúrgico en reoperaciones de obesidad por laparoscopia.

En el vídeo que acompaña este artículo, podrán ver una operación con retirada de una banda gástrica y conversión a by-pass gástrico. Estas dos acciones de retirada de banda y realización del by-pass gástrico están realizadas en la misma operación, con dos principios importantes para evitar complicaciones y dehiscencia de la sutura:

• Realizar la anastomosis (empalme) reservorio-yeyuno por debajo de donde estuvo colocada la banda: de este modo evitaremos el tejido fibroso reactivo a la banda, y el riesgo de mala cicatrización.
• Reforzar con sutura manual, las suturas mecánicas empleadas para la sección y grapado del estómago. Este gesto, no al alcance de todos los cirujanos, es difícil pero garantiza la seguridad de la operación y del paciente.

Actualmente, nuestra recomendación para aquellos pacientes operados de obesidad que optaron por una banda gástrica pero que no han conseguido mantener su objetivo de pérdida de peso, es que, en primer lugar, no se culpabilicen de no haber obtenido los objetivos previstos y soliciten la visita a un especialista para que pueda descartar otros motivos de fracaso de la banda gástrica que pudieran estar asociados a la reganancia de peso.

Seguramente, como indican las estadísticas, su caso es debido al alto índice de fracaso del método de la banda gástrica, y la mejor opción para alcanzar sus objetivos de pérdida de peso en la obesidad mórbida es reconvertir la banda gástrica en un by-pass gástrico por laparoscopia.